En un bol grande, mezcla la harina con la manteca. Agrega poco a poco el agua tibia mientras mezclas.
Incorpora la sal, el azúcar y el polvo de hornear. Amasa bien hasta obtener una masa suave y homogénea.
Dejar reposar:Cubre la masa con un paño limpio y deja reposar durante 30-40 minutos a temperatura ambiente.
Formar los buñuelos:
Hacer las porciones:
Una vez que la masa haya reposado, extiéndela con un rodillo sobre una superficie ligeramente enharinada.
Con la ayuda de un plato o molde circular, corta porciones redondas del tamaño que prefieras.
Freír los buñuelos:
Calienta abundante aceite en una sartén o cazo profundo.
Fríe las porciones de masa una a una hasta que estén doradas por ambos lados. Retira y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Preparar la miel:
Hacer la miel:
En una olla, mezcla el piloncillo (o miel de caña) con el agua, las ramas de canela y los clavos.
Cocina a fuego bajo, removiendo ocasionalmente, hasta que la mezcla espese y obtenga una consistencia de almíbar.
Servir:
Montaje:
Rocía los buñuelos con la miel caliente justo antes de servir. También puedes sumergirlos completamente en la miel si lo prefieres.
Tiempo de preparación: 40 minutos | Tiempo de cocción: 20 minutos | Tiempo total: 1 hora
Raciones: 8-10 buñuelos
