Separar las claras de las yemas. Batir las claras con una pizca de sal a punto de nieve con una batidora eléctrica. A mitad de la preparación, añadir la mitad del azúcar y seguir batiendo las claras.
2. Batir las yemas con el azúcar restante. Deben quedar blancas. Batir durante unos 4 minutos.
3. Añadir el queso mascarpone a las yemas varias veces. Batir todo con una batidora eléctrica hasta que se integren todos los ingredientes.
4. Batir las claras montadas con movimientos envolventes de abajo a arriba. Asegúrate de que la mezcla no se deshaga. Debe estar completamente integrada.
5. Mezcla el café con el ron y ponlo en el dispensador. Picamos el chocolate metiéndolo en una bolsa de plástico y batiéndolo con un mortero hasta obtener trozos pequeños.
6. Coloca los dedos de galleta cortados en el fondo de la taza y vierte el café y el ron por encima.
7. Luego, coloca la mezcla de tiramisú en una manga pastelera y forma la primera capa. Espolvorea algunos trozos de chocolate por encima. Encima, coloca otra capa de bizcochos de soletilla cortados, que también remojamos ligeramente en café.
8. Finalmente, agrega otra capa de tiramisú, hasta que llegue al borde de la taza. La alisamos un poco y la decoramos con el resto del chocolate picado.
9. Deja las tazas en el refrigerador durante al menos 5 horas.
10. Espolvorea el tiramisú con cacao en polvo al servir.